EUROPA
PRESS
27 junio
2023
Qué
son los quistes de millium o esas antiestéticas
bolitas blancas que puede aparecernos en el ojo o en
la cara
Hay personas a las que les aparecen
unas pequeñas o diminutas mejor dicho bolitas blancas en la mejilla o bien en el
arco del ojo que, más que nada, son molestas a nivel estético. Se trata de los
quistes de millium y vamos a conocer qué son y qué
hacer sobre todo con ellos porque a nadie le gusta tenerlos. Sobre todo, una
cosa que hay tener muy clara: jamás hay que apretarlos.
Entrevistamos para ello en Infosalus
a la doctora Petra Vega, médico estético y tesorera de la Sociedad Española de
Medicina Estética (SEME), quien nos explica que se trata de pequeñas bolitas
lisas, duras y blancas, de alrededor de 1 milímetro de diámetro que aparecen en
la piel de la cara.
¿Por qué aparecen?
Todo es debido, según cuenta, a un atrapamiento de queratina y de sebo dentro
del poro cutáneo (orificio de salida del folículo pilo sebáceo), por poros muy
cerrados, o por exceso de producción. "Son totalmente benignos. En
general, la palabra 'quiste' indica un proceso benigno, aunque todo depende lo
que contenga en su interior", añade.
Sus causas, según indica, pueden ser múltiples:
"Tendencia genética (por la textura de la piel), procesos cicatriciales,
tanto quirúrgicas como quemaduras o heridas traumáticas (al estimularse mucho
la queratina puede quedar a atrapada), acné, tabaco, exceso de sol, y algunos
cosméticos inapropiados para ese tipo de piel".
Dice la doctora Vega que solo muy raramente pueden estar
asociados a algunas enfermedades cutáneas: "En los bebés no es infrecuente
que aparezcan en la cara, incluso dentro de la boca, debido, posiblemente, a la
inmadurez de los folículos pilo sebáceos. Además, en los bebés suelen desaparecer
solos".
Cómo podemos prevenirlos
Aunque no se disponen de estadísticas, esta médico estética
reconoce que son bastante frecuentes en nuestra población, y a la hora de
prevenirlos subraya que, en todos los casos en que no son genéticos o por
traumatismos, podemos prevenirlos evitando sus causas: protegernos del sol, no
fumar y usar cosméticos apropiados a nuestra piel.
Si los manipulamos corremos el riesgo de infectarlos, según
matiza la doctora, al tiempo que resalta que no son granos y, por tanto, no
debemos apretarlos intentado que salgan (que tampoco deberíamos manipular),
pues a diferencia de estos no están infectados y con el tratamiento correcto no
dejan ninguna marca.
Por eso, la miembro de SEME subraya que, cuando los
detectemos debemos acudir a un especialista, primero porque el médico debe
hacer un diagnóstico de que realmente no son otra cosa (hay otras lesiones que
pueden confundirse), y segundo porque su tratamiento médico es fácil, seguro y
muy eficaz.
Cómo podemos hacerlos desaparecer
En última instancia, la doctora Vega mantiene que, mientras
que en los bebés como hemos dicho desaparecen solos, en el resto se realiza
--según le tamaño y la localización--bien a través de la extracción con aguja,
con bisturí o con láser; "aunque en ningún caso queda marca", matiza.
Subraya que los que ya se han quitado no pueden reaparecer,
si bien resalta esta especialista en Medicina Estética que pueden salir otros
en la misma zona, siempre que la causa sea genética, o bien por malos hábitos.
"En el caso de las cicatrices, finalizada la cicatrización suelen
remitir", concluye la miembro de SEME.